Basándonos en nuestra experiencia en nuestros principales destinos, también estamos desarrollando programas en varios otros países asiáticos, gracias a nuestras sólidas relaciones con socios locales.
Entre ciudades ultramodernas y tradiciones arraigadas, Taiwán es un destino rico en todos los sentidos. Sus paisajes insulares son una impresionante mezcla de montañas, llanuras y mar. Famosa por su gastronomía de múltiples influencias, la isla es también un crisol de arte y artesanía, con notables museos y colecciones, así como numerosos templos y santuarios que transmiten una espiritualidad cultural inigualable.
Singapur, ciudad-estado insular y centro financiero del sudeste asiático, lo tiene todo. Con sus barrios históricos, sus imponentes edificios, sus numerosos espacios verdes y su población multicultural, por no hablar de sus sólidas tradiciones y su identidad cultural, es un destino de elección fuera de lo común.
Myanmar, hogar de más de cien grupos étnicos, recibe el acertado nombre de "Tierra Dorada" por la belleza de sus numerosos templos y estupas resplandecientes. Este hermoso país es una tierra mística y espiritual con una historia que se remonta a miles de años, que se puede visitar al ritmo tranquilo y sereno de la vida birmana.
Verdadero tesoro cultural, Japón se divide entre inmensas ciudades casi futuristas y magníficos jardines y otras extensiones de naturaleza. Orgulloso de sus tradiciones y su sólida cultura, el país posee una identidad propia que no se encuentra en ningún otro lugar, gracias en gran medida a su rica historia. Del té a las artes marciales, de la caligrafía a la cocina fresca, Japón lo tiene todo.
Conocido a menudo como la "Pequeña Suiza de Asia", el Reino de Bután es uno de los países más misteriosos del Himalaya, y sólo está abierto a los viajeros desde 1974. Es sin duda uno de los países mejor conservados del mundo, con una flora y fauna excepcionales, y destaca como meca espiritual. Panoramas impresionantes y alegría de vivir son las consignas de esta nación única, creadora del indicador de Felicidad Nacional Bruta.
Asia Central, que comprende Kazajstán, Kirguistán, Uzbekistán, Tayikistán y Turkmenistán, es una región fascinante en la encrucijada de civilizaciones. Ofrece una experiencia auténtica gracias a sus legendarios lugares históricos, sus grandiosos paisajes (montañas, estepas, desiertos) y su cultura. Una región ideal para descubrir el patrimonio de la Ruta de la Seda.
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